martes, 30 de abril de 2013

Baloncesto: el zapato más adecuado

Recuperamos un fragmento de la entrevista que hace un par de años realicé a Tino Salvador, técnico del club de baloncesto de Peñíscola, en el cual hablamos de las características que debería cumplir el zapato para jugar a baloncesto.


 




domingo, 28 de abril de 2013

Dolor y callo bajo el quinto dedo (quinto radio en flexión plantar)


Hablemos de pies, y en este caso de un problema que si bien no suele ser frecuente, cuando aparece lo hace acompañado de un callo (hiperqueratosis) y dolor.

El caso que se presenta es el de un hombre de 55 años edad que ha necesitado los servicios de podología para tratarse un "callo revelde".

             Pie derecho. Bajo el dedo pequeño (en la cabeza del quinto metatarsiano) la  presencia del callo (hiperqueratosis).


El procedimiento seguido para su tratamiento pasa por dos aspectos: la reducción del dolor (que es el motivo por el cual esta persona ha requerido el servicio de podología) mediante la eliminación del callo (hiperqueratosis), y en segundo lugar la valoración de la biomecánica del pie para comprobar si es ésta la causa de la aparición del callo (hiperqueratosis).

         Aspecto de la piel una vez eliminado el callo (la hiperqueratosis). 


Del resultado de la valoración biomecánica del pie se desprende que el quinto metatarsiano está en posición de flexión plantar, y por tanto soporta más presión. Por este motivo primero aparece el callo (hiperqueratosis) y después el dolor.


El tratamiento ortopodológico de elección pasa por igualar la presión en todos los metatarsianos. Así se reducirá el dolor y esta persona va a poder andar de nuevo sin dolor.

Imágenes del tratamiento ortopodológico. A la izquierda, la plantilla vista por debajo. A la derecha, detalle de la descarga realizada sobre el callo (hiperqueratosis) que al mismo tiempo sirve para colocar a todos los metatarsianos de nuevo en el mismo plano de apoyo.



El resultado de la aplicación del tratamiento ortopodológico es muy efectivo en lo que se refiere al alivio del dolor puesto que la zona dolorosa ya no apoya. En segundo lugar, y en este caso a largo periodo de tiempo, se restituyen las condiciones biomecánicas del pie. Esto hace que sea posible predecir que no volverá a aparecer dolor y posiblemente la cantidad de callo formado (hiperqueratosis) disminuya paulatinamente.